Este lunes, un denominado «mausoleo narco» amaneció demolido en la comuna de Lo Espejo, Región Metropolitana. Se trata de la construcción conmemorativa en honor a Diego Marchant, un joven que fue asesinado en un contexto de enfrentamiento de bandas rivales y quien era hijo del líder de una organización criminal.
En primera instancia, se creía que podían ser autoridades municipales las que podían estar detrás de la decisión de echar abajo la estructura. Esto luego de que el propio Presidente Gabriel Boric anunciara, en el marco de su Cuenta Pública, que se demolería cualquier tipo de expresión que ensalzara a figuras delictuales en espacios públicos.
«He instruido a la Subsecretaría de Desarrollo Regional que transfiera recursos a los municipios para demoler todos los memoriales narco donde quiera que aparezcan. En el caso de los funerales, en donde las bandas atemorizan y paralizan a las comunidades, presentaremos un proyecto de ley para restringir estas prácticas, limitando los días de velorio y el recorrido de los cortejos, entre otras medidas», dijo el Mandatario en su alocución.
«Nadie tiene derecho a amedrentar a la población y violentar los barrios, por mucha que sea la pena que sienta por la partida de un ser querido», agregó.
De hecho, tras el anuncio presidencial fue la ministra del Interior, Carolina Tohá, quien adelantó que el primer «mausoleo narco» demolido sería precisamente el que apareció en tal condición en la comuna de Lo Espejo.
Vecinos y familiares destruyeron mausoleo
Sin embargo, fueron las propias autoridades las que se desvincularon de haber tenido participación en este hecho, asegurando que habían sido vecinos y familiares de la persona fallecida quienes destruyeron este mausoleo, adelantándose a la intervención que iban a realizar distintas instituciones.
Eso sí, desde la municipalidad de esa comuna, aseguraron que funcionarios de Lo Espejo, en compañía de Carabineros, resguardaron a quienes realizaban la demolición.
En ese sentido, cabe precisar que mientras se realizó esta intervención no se registraron enfrentamientos de vecinos con fuerza policial.