La creciente preocupación por la seguridad en la comuna de Melipilla ha sido el foco de atención de las instituciones públicas y judiciales en los últimos tiempos.
Una serie de incidentes sangrientos han generado alarma, agravados por la presencia de redes de grupos criminales vinculados al narcotráfico que intentan controlar determinadas áreas del territorio.
Una de las organizaciones más notorias en este contexto es el cártel conocido como «Los Ramírez», también identificado como «Jalisco Melipilla Nueva Generación».
El último episodio que subraya esta situación tuvo lugar en el Tribunal de Garantía de Melipilla, específicamente en sus dependencias ubicadas en Ortuzar 853, de la misma comuna.
Durante una rutinaria limpieza, gendarmes hicieron un hallazgo impactante que ha captado la atención de la comunidad y los medios de comunicación.
El 22 de agosto, alrededor de las 11:30 de la mañana, una cabo de segunda clase de Gendarmería se encontraba realizando tareas de limpieza en el área conocida como «locutorio».
Este espacio es utilizado por imputados y defensores para conversar antes o después de las audiencias. Mientras realizaba su labor, la cabo notó un objeto inusual al pasar la escoba por debajo de «los roperillos metálicos». Intrigada, procedió a verificar y quedó atónita al descubrir un arma de fuego tipo pistola cuidadosamente escondida.
La cabo, de acuerdo a distintos testimonios recopilados durante el proceso, informó inmediatamente al gendarme jefe del turno. Se estableció una coordinación con el administrador del Tribunal, y posteriormente se presentó una denuncia ante Carabineros.
Peritajes iniciales determinaron que el arma de fuego, una pistola marca Bersa, modelo Thunder 308, de color negro con número de serie N°J06828, estaba cargada con una munición en la recámara, lo que indicaba su preparación para ser disparada.
Además del arma, se encontró un cargador metálico y 8 cartuchos balísticos marca CBC, calibre 380. De acuerdo a registros, esta arma había sido reportada como robada, aspecto que se encuentra bajo investigación.
La Fiscalía ha tomado medidas iniciales para esclarecer los hechos, encomendando la tarea al OS9 de Carabineros. Las primeras acciones se centran en la revisión de las cámaras de seguridad del tribunal, así como en la investigación de los registros de ingreso a las dependencias, los cuales incluyen a gendarmes y abogados.
La teoría de una posible fuga desde el interior del tribunal ha sido planteada como parte de las indagaciones en curso. Se especula que podría haber una planificación detrás de este incidente, relacionada con la posibilidad de detenciones en proceso.
Este enigma plantea interrogantes sobre quiénes podrían estar detrás de una posible fuga de tal envergadura.Fuentes cercanas a Radio Bío Bío indican que los imputados que llegan a la sala pasan por una exhaustiva revisión por parte de las fuerzas policiales y Gendarmería de Chile, responsables de la seguridad del recinto.
La posibilidad de que el arma hubiera sido destinada para facilitar una fuga destaca la preocupación sobre la preparación de los grupos criminales en el país.
Este descubrimiento y las circunstancias que lo rodean son motivo de interés y vigilancia por parte de las autoridades, quienes trabajan incansablemente para garantizar la seguridad y el orden en la comuna de Melipilla y sus alrededores.
