➡️La derecha, que se presentó a los históricos comicios constituyentes de este fin de semana en una única lista denominada «Vamos por Chile» conformada por los partidos del oficialismo (RN, UDI, Evópoli y el PRI) y la ultraderecha extraparlamentaria, se quedó lejos de los 52 escaños necesarios para influir en la redacción de la nueva Carta Magna que reemplazará a la actual, vigente desde la dictadura cívico-militar.
Los resultados preliminares del Servicio Electoral dan cuenta que la suma de las dos grandes listas de la oposición: «Apruebo Dignidad», que incluye a los partidos del Frente Amplio y el Partido Comunista; y la «Lista del Apruebo», integrada por los partidos de la ex Concertación (DC, PPD, PR y PS), junto con los candidatos independientes fuera de pacto, superaron los dos tercios de los 155 escaños de la Convención Constitucional, que contará con 17 cupos reservados para los pueblos indígenas y tendrá paridad entre hombres y mujeres, algo inédito en el mundo.
«La ciudadanía nos ha dado un claro y fuerte mensaje al Gobierno y a todas las fuerzas políticas tradicionales. No estamos sintonizando con las demandas y con los anhelos de la ciudadanía», dijo el Presidente Sebastián Piñera, flanqueado por todos sus ministros, en un discurso en el Palacio de La Moneda.
En este contexto, el presidente de la Unión Demócrata Independiente (UDI), Javier Macaya, reconoció que el pueblo de Chile, por una amplia mayoría, quiere que se escriban nuevas reglas.
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